Los habitantes de 2.766 pueblos españoles no pueden disfrutar de Internet a 10 megas. Eso sí, irónicamente, quizás tengan una conexión móvil con Internet de calidad 3,5G.
El informe anual de cobertura que ha publicado la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información (SETSI) ha sacado los colores a los objetivos que se proponen en la Agenda Digital Europea.
Para 2020, la Comisión Europea pretende haber logrado garantizar a todos los ciudadanos europeos acceso a Internet de 30 megas. Por el momento, ese objetivo parece un poco lejano.
Los intereses privados son otros y, aunque las conexiones de banda ancha fija a 10 Mbps no alcancen a todos, la Fibra Óptica no deja de extenderse y extenderse, hasta llegar ya al 44,8% de los hogares españoles.
Esto significa, que el 61% de la población podría contratar Fibra Óptica de 100 megas o más, en el caso de que le interese.
Estos números contrastan con la realidad de las zonas rurales: un 15,2% de la población, lo que implica a 7,2 millones de españoles, no pueden navegar por Internet a 10 Mbps, ni aunque quisieran.
La situación aún es más grave para un 4,4% de los españoles, es decir 800.000 habitantes, que no tienen acceso ni tan siquiera a velocidad de Internet de 2 megas.
Sin embargo, ¡que no cunda el pánico! El 98% de los habitantes en zona rural tiene acceso a banda ancha móvil 3,5G. ¿Tendrá esto algún tipo de sentido?